Te meten en una cajita. Te cantan, te lloran. Te dicen un montón de cosas que debieron haberte dicho antes, pero por alguna razón nadie se atrevió a hacerlo.
Luego hablan puras cosas lindas de ti. Que si era buena persona, que si creía mucho en Dios, que si ayudaba a los pobres, que nunca la vamos a olvidar. etc etc etc…
Después dicen unas palabras solemnes y siembran la cajita en un hermoso jardín lleno de flores.
¡Qué bonito es un entierro!