Queridos Linearilovers:
Es un placer para mi el despertarlos cada mañana con un lindo mensaje de optimismo y alegría para que su día sea una grata experiencia. Intentar, a mi muy particular manera, de crear un mundo mejor en el que todos podamos ser felices.
Es este gusto de sentirme leída, de saberme imaginada, el combustible ideal para mantener siempre mi frente en alto y mis pies flotando a ras del suelo. Sin embargo, lo más importante para que yo escriba, no es es el tener una audiencia, no es el recibir múltiples elogios, comentarios o hermosos regalos. Más allá de la enervante sensación que me provoca su retroalimentación; lo esencial es escribir lo que brota de mi alma.
En estos últimos meses he sentido que a pesar de gozar de una gran popularidad con mis lectores, he perdido un poco el rumbo de lo que me mueve el corazón. He sentido que como aquella canción del verano, lentamente se ha comenzado a esfumar mi magia confirme las hojas comienzan a caer de los árboles. Es por eso que he tomado la decisión de retirarme de las redes sociales, al menos por una temporada.
Confío en que este retiro ayude a reencontrarme conmigo misma. Quiero poder volver a tener la capacidad de maravillarme de la magia oculta en los objetos cotidianos. Quiero desmantelar mi cabeza, limpiar cuidadosamente cada una de las partes móviles que la componen, engrasar mis engranes, cambiar algunos resortes desgastados y quizás quitarle uno o dos tornillos que me impiden ser en plenamente la persona que merezco ser.
Gracias por todo el amor que me han brindado a lo largo de estos casi cuatro años.
Prometo ser mejor, tan solo necesito tiempo y tal vez un empujoncito.
Por favor no estén tristes, Los invito a seguir soñando mientras regreso.
Platicamos prontito.